No siempre depende de nosotros ser pobres; pero siempre depende de nosotros hacer respetar nuestra pobreza
Nos acostumbramos a levantarnos cada día como si no pudiera ser de otra manera, nos acostumbramos a la violencia como algo infaltable en las noticias, nos acostumbramos al paisaje habitual de pobreza y de la miseria caminando por las calles de nuestra ciudad y buscar en la calle el pan de cada día para llevarle a mi familia