jueves, 27 de octubre de 2016

la casualidad mas bonita ....







He aprendido que los amores, pueden llegar por sorpresa o terminar en una noche. Que grandes amigos pueden volverse grandes desconocidos, y que por el contrario, un desconocido puede volverse alguien inseparable. Que el "nunca más", nunca se cumple, y que el "para siempre", siempre termina. Que el que quiere, lo puede, lo sigue, lo logra y lo consigue. Que el que arriesga no pierde nada, y el que no arriesga, no gana. Que si quieres ver a una persona, búscala, mañana será tarde. Que el sentir dolor es inevitable, pero sufrir es opcional. Y sobre todo, he aprendido que no sirve de nada, seguir negando lo evidente
Te acercas a mí con una sonrisa y me dedicas una mirada. Pones tu mano en mi hombro. Me derrito por dentro sin poder abrazarte como tanto deseo. Quiero poder mirarte a los ojos y que sepas que están llenos de amor. Quiero poder susurrarte al oído que nunca te voy a dejar escapar, que eres mi único deseo en la vida. Quiero que podamos ir de la mano por la calle, que podamos sentarnos juntos, que seamos una simple pareja más... Me gusta que me mires sonriendo mientras cuentas cualquier cosa que te ha pasado. Me gusta pensar que quieres estar conmigo a pesar de todo. Sueño contigo cada noche, pienso en ti cada segundo de mi vida y no puedo hablar contigo pensando que somos más que amigos
Adoro cuando ríes sin motivo alguno. Me encanta que cuando paseamos te juntes a mí, agarrándome la mano y mostrándome que estás a mi lado. Me encanta ver esos ojos que me vuelven loca y saber que el brillo de felicidad es por mi presencia. Nunca imaginé que tú fueses la persona que me haría tan feliz. Elegirme a mí... no me lo esperaba. Aunque seas un cabezón y siempre me tengas que llevar la contraria en todo lo que digo, aunque me hagas reír siempre por mucho que no quiero, aunque hagas cosas raras... Me encantas. Sí, eres la única persona que me ha dado la mano cuando me he caído, ayudándome a levantarme. Eres la única persona que me conoce realmente bien. Eres esa persona que me hace reír, y a veces llorar, pero siempre acaba arreglándolo agarrándome de la cintura y esperando a que me calme. Gracias por demostrarme que la felicidad se puede alcanzar. Gracias por estar día a día por y para mí. Otra vez más, te agradezco todo lo que haces por mí. Otra vez más te digo que eres la persona que más me ha apoyado. Y otra vez más te digo que espero que todo esto siga así, y si algún día cambia, que sea a mejor.