domingo, 23 de octubre de 2016

reflexión: lo dejo por ser pobre pero el tiempo le dio la revancha y .....







Ella inmediatamente le reconoció. Se acercó a él y, sin mediar palabra le dijo: “Me casé con un hombre muy inteligente, cuyo salario es de 15.700 dólares al mes. ¿Podrías haber superado eso?”. El chico -ahora convertido en un hombre- oyó la despectiva pregunta de aquella mujer a la solía amar, sin poder hacer otra cosa que retener sus lágrimas y guardar silencio.
Poco después, el esposo de la mujer se acercó a donde estaban ellos y antes de que ella le presentara o pudiera articular palabra alguna, su marido reconoció al momento al hombre que estaba con su esposa y le dijo: “¿Señor? ¡Buenas tardes, señor! Veo que ya conoce usted a mi esposa”.
El hombre muy educadamente le contestó: “Buenas tardes, señor…”. “Soy Carter, señor”, respondió el esposo.
El marido miró a su esposa y le dijo: “Querida, quiero presentarte a mi jefe. Es el responsable del proyecto de los 100 millones de dólares en el que he estado trabajando”. La mujer se quedó sorprendida y en shock por el giro de los acontecimientos.
El hombre sonrió y dijo: “Bueno, Sr. Carter, me tengo que ir. Tengo muchas cosas importantes que atender. Fue espléndido verlo hoy. Que tenga un excelente día”.
Se despidieron y cada uno tomó su camino.