sábado, 15 de julio de 2017

TOP 5 PERROS BAILANDO






Hay personas a las que les gustan los perros. Yo prefiero los gatos. Al menos no existen gatos policías.
Entre más conozco a las personas que me rodean, más comienzo a querer a mi perro.
Las mascotas nos enseñan lo que es la amistad, la responsabilidad y el uso del papel periódico para limpiarles sus gracias.
No importa que pueda morder mi ropa y llenarla de pelo, cuando se frota cariñosamente contra mí. Puedo ir a comprar prendas nuevas cuando quiera, pero a un amigo como él jamás lo podré encontrar.
Si nunca has tenido aunque sea un solo perro, hay algo que está mal en tu vida.
Para fabricar un abrigo de piel, puede necesitarse de muchos animales. En cambio para lucirlo solo hace falta uno.
Si nuestras mascotas tuvieran la capacidad de hablar, ¡cuántas cosas no nos dirían!
Un gato no te va a pedir permiso para entrar a tu habitación, a la cocina o a cualquier lugar de tu casa. Una vez que has llevado uno, prácticamente se convierte en el dueño de ella y serás tú quien necesite de su aprobación.
Yo tengo un único amigo en el mundo que jamás se atrevería a traicionarme, quizá no pueda hablar y ladre demasiado, pero hasta ahora es el más leal que he tenido.
A tu mascota no le importa si eres rico o pobre, alto o bajo, feo o guapo. Lo único que quiere de ti es un poco de cariño… y tener su plato de comida lleno todos los días.
A veces cuando saco a pasear a mi perro, me pregunto quien esta paseando a quien.